Una de las cosas más importantes para David y Araceli era poner disfrutar de su boda y tener un emotivo reportaje fotográfico de su día, sin tener que posar ni experimentar situaciones incómodas.
Cada vez mas parejas llegan a nosotros transmitiéndonos la importancia de disfrutar de su celebración, sin tener que estar pendientes de los fotógrafos. Y ahí es cuando entramos nosotros, con nuestro estilo de boda documental, sin forzar posados incómodos, y realizando un reportaje moderno, fresco y elegante.
La boda tuvo lugar en Lucena, municipio cordobés situado a 487 metros de altitud y 67 kilómetros de la ciudad.
David decidió realizar los preparativos con la presencia de sus padres, donde pudimos vivir un momento muy emotivo cuando recibió una nota de la que iba a ser en pocos minutos su futura esposa.
Araceli sin embargo decidió estar rodeada, además de sus padres y hermanos, también de algunos familiares cercanos y las amigas de toda la vida. Hubo sorpresas, risas y algún llanto.
La ceremonia religiosa tuvo lugar en un precioso enclave, a seis kilómetros del pueblo, en la cima de la Sierra de Aras, se alza el Santuario de María Santísima de Araceli.
Después de tomar algunas fotos con el precioso atardecer que nos regaló este mes de septiembre, los novios junto a sus familiares y amigos gozaron de una velada, rieron y bailaron hasta altas horas.
Esperamos que esta haya sido el primero de muchos reportajes en esta localidad y alrededores.
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