Dúo de tattoos

Amor tatuado en la piel

Con Yasmina y Sergio decidimos hacer una sesión de preboda lo más sencilla posible. ¿La ropa elegida para esta ocasión? Su ropa de diario, con la que más cómodo se siente uno.

Decidimos irnos a la campiña cordobesa al atardecer, un momento privilegiado para hacer bonitas fotos de preboda. El paisaje fue nuestro escenario y puso la guinda al pastel con los colores que nos regaló aquella tarde el sol al ponerse por el horizonte.

La complicidad de sus miradas y sus gestos no se hicieron esperar, a pesar de haberme advertido que eran algo vergonzosos. Nada más lejos de la realidad. Como yo les digo siempre a las personas que se ponen delante de mí para hacerse fotos. «La cámara no miente y es capaz de captar lo que nuestros ojos no son capaces de ver.» Y así fue.

Esta preboda llena de momentos naturales, emotivas y sin posados forzados describen perfectamente el amor y la admiración que se tiene el uno por el otro.

«Todos tienen su propio destino, pero no todos deciden seguirlo. Ellos si.»